Besos de Vampiro 2: ¡Asesino!

  -¡¿Castigada?! -gritó Ellen mientras sus padres la sacaban de la comisaría de policia.
Su padre la miró estudiando su rostro. Era tan injusto, almenos para Ellen.
  -Ella empezó -insitió Ellen pero sus padres no escuchaban. Ya era bastante bochornoso sacar a Ellen de allí.
  -Hija -comenzó a hablar su madre -No importa que haya pasado... te peleaste en un bar con Patty, tu mejor amiga -exclamó haciendo énfasis en la palabra "amiga".
Ellen frunció el ceño y decidió lo escuchar a sus padres. Como siempre, solo les importaba lo que la gente decía sobre ellos.
  A la tarde, Henry la llamó un par de veces, pero Ellen no quizo contestar. Ya tenía otros planes...

  Ellie salió por la ventana y tomó la bicicleta de Cristian. Ian le había dicho que se encontrarían en la playa. Aunque era inseguro ya que alguien podría verlos, Ellie se aventuró. Al encontrarse con Ian, no pudo evitar sonreír. Su rostro era extremamente atrayente. A su lado estaba Sue, la gemela. También era sexy, y las miradas de los hombres siempre estaban sobre ella. En conclusión, Ian y Sue llamaban la atención de todo el mundo.
  -¿Saliste pronto? -preguntó Ian sonriendo con cierta maldad en su mirada.
  -Mis padres... bueno no quiero hablar de eso...
  -Únete a nosotros -exclamó tomándola por la cintura ligeramente. El toque produjo que todos los nervios de Ellen se sobresaltaran.
  Ellen notó que Sue ya no estaba. ¿Qué había pasado? Desaparecían de un momento a otro. Durante la noche, empezaron a llegar chicos y chicas. Era una fiesta playera y Ellie decidió bailar con Ian. En seguida, Ellie notó la presencia de Henry y a su lado estaba Patty. Ellie se pegó más aún a Ian para producirle celos, pero más que eso, para sentirse más cerca de Ian.
  De repente, se unieron tanto, que la cabeza de Ellie reposó sobre Ian. Fue un momento íntimo y las canciones románticas empezaron. Ellie notó que la respiración de Ian se volvió irregular y sus fosas nasales se agitaron de tal manera, que parecía que Ian estaba a punto de estallar. Ellie se separó ligeramente, y notó su corazón latía más rápido de lo común.

  En ese momento, Ian se alejó de ella rápidamente y se mezcló entre la multitud desapareciendo totalmente. Ellie permaneció de pie, intacta, sin saber que hacer. Su corazón latía tan rápido que podía sentirlo aún en el ruido. Algo malo estaba a punto de pasar...
 Ellie se movió entre la multitud, y vio a Cristian conversando alegremente con Sue. Al principio no le importó pero luego caminó hacia ellos. Sin embargo, Henry se paró justo en frente.
  -¿Qué quieres? -preguntó ella molesta.
  -Solo quiero hablar... -contestó Henry.
  -Pero, yo no -respondió desinteresada.
  -Solo es un momento...

  Ellie lo empujó y se movió. Ellie decidió buscar a Cristian. Mientras corría, recordó el lugar donde Cristian llevaba a sus novias, entonces desvió el camino y se dirigió al pequeño golfo a unos pequeños metros de la playa. Se acercó lentamente al ver dos figuras moviendose en la oscuridad. Se acercó a hurtadillas y logró ver a un hombre. Era Ian, pero no estaba solo. Patty estaba allí. Ian se acercó a ella y le mordió el cuello. Patty dió un gran grito, pero la música opaco la situación. Ellie estaba perpleja. Ian acababa de morder a Patty, y seguramente, acababa de matarla...

  -¿Así que quieres ser un vampiro? -preguntó Sue seductoramente.
  Cristian asintió sin mirar las consecuencias.
  -Pero solo tienes 16 años, aún tienes mucho y...
  -¡No me importa! -exclamó Cristian. -Siendo vampiro, no tendré que ir al instituto, ni vivir con mis padres, ni ver a mi hermana o a sus pretenciosos amigos.
  Sue contempló las posibilidades.
  -Está bien, lo haré... -dijo oliendo su deliciosa sangre. -Pero tengo dos condiciones; jamás, jamás dirás quién te convirtió...
  -Lo juro.
  -Y enseguida, asesinarás al alcalde -continuó.
  Los ojos de Cristian se abrieron como platos.
  -Pero, pero...
  Sue tomó la muñeca de Cristian y la mordió con fuerza.